Quizás sea tu caso. Llevas años sufriendo por los kilos de más. Lo has intentado todo y no bajas de peso. O quizás bajes unos kilos pero vuelves a cogerlos… ¡y acompañados de otros cuantos más! Buscas y buscas opciones para conseguir el cuerpo que deseas y encuentras la solución: la cirugía bariátrica. ¡Tu vida vuelve a tener sentido! Ilusionada por los casos de éxito que ves, lo cuentas a tu entorno y ahí comienza el calvario: nadie te entiende. No comprenden que quieras pasar por quirófano para perder esos kilos. Te dicen que tampoco te sobran tantos, que toda la familia ha estado gorda, que es genética y no se puede hacer nada, etc.
Y ahí estás tú, en un mar de dudas sin saber qué hacer ni a quién hacer caso. Sabes que es tu única opción pero tienes a todo el mundo en contra. ¿Cómo lidiar con un entorno que no te entiende ni te apoya?
¿Lo tienen que saber?
Esta es la primera pregunta que te debes de hacer cuando empiezas en este proceso. Una vez que ya estás segura de que la cirugía bariátrica es tu salvación y que sabes todo acerca de ella, debes cuestionarte si tus familiares y amigos deben saber acerca de que te vas a realizar la intervención.
Tú mejor que nadie sabes qué tipo de entorno tienes. Debes conocerlos y por ello sabrás si con esta noticia los tendrás de tu lado o en contra tuya. Incluso, habrá algunos que te apoyen y otros que te critiquen.
Una vez que tengas claro cómo son ellos, decide si realmente deben saberlo. Mi recomendación es que, aquellos a los que sepas que te van a apoyar, se lo cuentes, puesto que siempre viene bien tener un punto de apoyo para cuando las fuerzas flaqueen.
En cambio, si ya sabes que lo que vas a recibir de tu entorno son dudas, críticas y similares, pues te recomendaría que no se lo dijeses. Esto es algo bastante personal, puesto que quizás te sientas mal por no contarlo, porque pienses que se van a molestar, que si pasa algo lo deberían saber… Como digo, es una cuestión bastante personal, pero sí que te recomiendo que te tomes tu tiempo para decidir si lo dices o no a este tipo de gente.
Ten en cuenta que, si anímicamente no estás lo suficientemente fuerte, tener a alguien alrededor que te recuerde una y otra vez las cosas malas o los peligros a los que te puedes enfrentar no te harán ningún bien, todo lo contrario. Sopesa qué prefieres, si aguantar las críticas sobre lo que vas a hacer o aguantar el remordimiento por no decirlo.
Haz lo que sientas
Conseguidora, me gustaría que de este post lo que te quede es que, la decisión final es tuya y solo tuya. Los demás pueden estar a favor o en contra por diferentes motivos, pero siempre debe primar tu opinión y decisión.
Está bien que se preocupen y que muestren sus miedos y reticencias, pero la decisión final es tuya. Eres tú quien debe decidirse, al fin y al cabo es tu cuerpo y tu vida.
El primer paso es informarse a fondo de la técnica, los riesgos, los cambios postquirúrgicos, el cirujano en el que pones tu vida, etc. Información es poder, así que empápate de todo lo que tenga que ver con la cirugía bariátrica. Hazte experta en ella.
Con toda esa información, estarás más que capacitada para tomar la decisión correcta y ser consecuente con ella. De esta forma, además, podrás calmar las dudas de tus conocidos y no te afectarán, pues tú sabes lo que estás haciendo.
Haz lo que sientas que debes hacer. Eres tú quien debe controlar tu vida. Los demás pueden darte su opinión, pero no te dejes arrastrar por ella. Las malas energías debes mantenerlas alejadas cuando decidas hacer un cambio tan drástico como este. Lo que menos necesitas en este momento es algo así.
Confía, al final el tiempo te dará la razón
Toma la decisión pensando únicamente en tu bienestar, físico y, sobretodo, emocional. Tanto la de operarte como la de contarlo.
Si estás informada al 100% del proceso que vas a seguir, conocerás en qué consiste ser bariátrico, en qué puede pasar, qué no, cuanto puedes llegar a perder… no tienes nada que temer.
Si sientes que debes hacerlo, hazlo. El tiempo terminará dándote la razón, pues sólo tú conoces la necesidad interna que tienes de lograr salir de esa obesidad. No puede salir mal algo que necesitas como el aire para vivir. Si sumas necesidad vital y conocimiento, todo irá bien. Aléjate de malas vibraciones, y el éxito está asegurado.
Conseguidora, la vida está llena de “y si…” de los que no sabremos la respuesta hasta que nos atrevamos. Sigue a tu alma y tu corazón. Deshazte de malas energías y guíate por tus sueños.