Los cambios necesitan paciencia

Esto nos ha pasado a todas: comenzamos un hábito nuevo, como comer bien o entrenar, y queremos ver los resultados ya, inmediatamente. No tenemos paciencia ninguna. Además, en seguida nos viene a la cabeza pensamientos del tipo: “a tal persona se le notaban los resultados pronto” y de ahí derivamos a “no lo voy a lograr”. Y ya estamos en el fracaso. Conseguidora, el tiempo es muy relativo y te voy a decir por qué. 

¿Cuánto tiempo has tardado en verte cómo estás?

Sé sincera contigo mismo: ¿cuánto tiempo has tardado en alcanzar el punto en el que estás de aquello que quieres cambiar? Años, seguro, muchos además, sin duda. No ha aparecido de un día para otro, ¿verdad?. Entonces, ¿por qué esperas que se revierta en apenas unos días o semanas?

No has llegado hasta aquí de la noche a la mañana. Durante mucho tiempo te has estado trabajando ese resultado a base de repetir patrones de conducta y, sobretodo, de pensamiento. Llevas pensando mal mucho tiempo y eso se ha reflejado en tu cuerpo.

El cambio NECESITA paciencia

paciencia

Comúnmente creemos que los cambios físicos dependen sólo de las actividades que hacemos en el plano físico para cambiarlas. Me explico. Por ejemplo, pensamos que para bajar de peso sólo debemos hacer actividades “físicas”, como hacer dieta y ejercicio. 

Y es cierto que estas dos intervenciones son importantes, por supuesto, pero la clave está en cambiar la mente que te llevó a ese estado. Si no cambiamos la forma en que nos vemos, hablamos y pensamos, esos cambios serán temporales, no se mantendrán a largo plazo y volveremos al estado inicial. 

¿Sabes cómo sé que esto que te digo es cierto? Porque nos ha pasado a TODAS en multitud de ocasiones, o ¿a caso no has hecho miles de dietas, has perdido X kilos y poco a poco lo has recuperado?

¿Por qué no tienes paciencia para el cambio?

Creo que hay dos razones principales que nos impiden tener la paciencia necesaria para mantener el cambio de hábitos durante el tiempo necesario para ver resultados:

  1. No somos conscientes de la importancia de la mente en nuestra vida. Y es que todo lo que tenemos en el plano físico procede de la mente, es decir, primero tienes que pensarlo para después crearlo. Además, más del 90 % de los pensamientos que tenemos son inconscientes, por lo que hazte una idea de la importancia que tiene en tu vida, y, donde más, en los hábitos.
  1. Porque estamos inmersas en la cultura de la inmediatez. Es así conseguidora, lo queremos todo ya, no sabemos esperar, no queremos esforzarnos durante mucho tiempo. Queremos hacer el mínimo esfuerzo y recibir a cambio la mayor recompensa y, sobretodo, cuanto antes.

Ya sabes conseguidora, haz de la paciencia y la constancia dos características tuyas y conseguirás todo lo que desees.